Argentina

En 2021 comenzaba a asomar en el horizonte digital de los argentinos el nombre y apellido de Javier Milei. Su figura en las redes sociales empezaba a lograr relieve propio, capitalizando su paso por los medios de comunicación, logrando construir un perfil político en ciernes, pero potente.

El batacazo libertario en las urnas de las elecciones primarias del 13 de agosto sorprendió a propios y ajenos; más a los ajenos que a los propios.

Las elecciones generales siempre reavivan el interés de la ciudadanía por la política. El desafío es determinar la calidad de esa reconexión que se da cada dos años, en contextos sociales, políticos y económicos cambiantes.

Como un escalador aficionado, aunque convencido de sus propias fuerzas, Javier Milei logró en mayo continuar liderando el protagonismo digital en redes sociales y la Web.

El fenómeno de los libertarios argentinos trasciende el impacto del aura político de Javier Milei. El economista y precandidato presidencial viene creciendo en las encuestas, al ritmo del hartazgo social por la crisis económica, social y política que de manera crónica condiciona al país.

Las redes sociales no perdonan, y cuando se trata del presidente de la Nación, mucho menos. Desde que estalló el escándalo el #OlivosGate por el cumpleaños de Fabiola Yáñez, los usuarios activaron niveles de odio sin precedentes contra Alberto Fernández.