CONICET: Un evento científico convertido en fenómeno digital

La transmisión en vivo de la expedición en el fondo del mar argentino despertó un inusitado interés de las redes por los descubrimientos científicos.
CONICET: Un evento científico convertido en fenómeno digital
CONICET: Un evento científico convertido en fenómeno digital

Desde el pasado 23 de julio, la expedición “Underwater Oases of Mar del Plata Canyon: Talud Continental IV”, realizada por científicos del CONICET con el apoyo del Schmidt Ocean Institute, transmite en vivo imágenes submarinas de hasta 3.900 metros de profundidad desde el Cañón Submarino frente a Mar del Plata.

Transmisión en vivo a 3.900 metros de profundidad: en colaboración con el <i>Schmidt Ocean Institute</i>, investigadores del CONICET realizan la expedición “Underwater Oases of Mar Del Plata Canyon: Talud Continental IV”
La campaña explora el cañón submarino Mar del Plata, una región de alta biodiversidad y escasamente estudiada del Atlántico sur. La misión cuenta con apoyo del CONICET y financiamiento internacional. Se transmite en vivo por YouTube.

Los videos capturados por el vehículo operado remotamente SuBastian muestran criaturas sorprendentes en ultra alta definición: estrellas de mar naranjas, pepinos de mar violetas, esponjas carnívoras y crustáceos que parecen salidos de otro planeta.

Un crecimiento inédito

Un análisis de Monitor Digital muestra el fenómeno del interés por el CONICET reflejado en las consultas en la Web.

El interés de los argentinos en Google por el CONICET creció un 1.328 % entre junio y agosto de 2025.

Un fenómeno que ilustra el poder de la divulgación científica cuando logra conectar con la emoción, la curiosidad y el asombro.

Durante meses, las búsquedas por el organismo científico argentino mantuvieron un ritmo plano, con picos esporádicos, pero moderados.

Sin embargo, a partir de mediados de julio, la curva explotó de manera vertical, alcanzando niveles históricos, nunca antes registrados en términos de consultas digitales.

¿Qué explica este salto?

  • Las transmisiones en vivo desde el fondo del mar argentino fueron el disparador de esta ola de búsquedas.
  • A partir de la expedición del Schmidt Ocean Institute junto al CONICET, miles de argentinos comenzaron a preguntarse:
    • ¿Qué es el CONICET?
    • ¿Quiénes son los científicos detrás de estas imágenes?
    • ¿Cómo se financia esta investigación?
    • ¿Dónde puedo ver el streaming?
  • También resurgió el interés por los temas vinculados al mar argentino, su biodiversidad, su protección legal y el papel del conocimiento científico en la soberanía ambiental.

Ciencia, "orgullo nacional"

La nube de palabras que surge de la conversación de los argentinos en redes sociales sobre "el streaming del CONICET" refuerza un sentimiento de asombro, orgullo y fascinación ante las imágenes transmitidas.

Términos como “increíble”, “explora”, “nuevas especies”, “alto stream”, “mejor stream”, sugieren una recepción altamente emocional y positiva.

El uso de emojis con reacciones de “asombro”, “me gusta” y “me encanta” refuerza esta lectura emocional.

Se trata, ni más ni menos, que de una suerte de apropiación simbólica y emocional del CONICET como emblema de ciencia pública, conocimiento nacional y exploración tecnológica.

En un clima político muchas veces tenso hacia las instituciones científicas, este episodio en redes funcionó como una reivindicación colectiva, amplificada por la espectacularidad del océano en vivo.

Ciencia que interpela

Este pico digital en torno al CONICET argentino no responde a una campaña de marketing ni a una coyuntura política directa, sino a un fenómeno más profundo: la fascinación del público general frente al conocimiento real, visual, tangible y en tiempo real.

La conexión emocional con los científicos y las especies marinas, muchas de ellas nunca antes vistas, generó una reacción en cadena.

Lo que comenzó como un evento especializado, terminó convertido en una experiencia colectiva.

La ciencia no es ajena al interés masivo, cuando se comunica bien, más aún cuando se potencia la comunicación con buenos entornos digitales para trascender el círculo académico y poner a instituciones como el CONICET en el centro de la discusión pública.

Más números que sorprenden

  • El livestream del CONICET alcanzó picos de más de 1,6 millones de vistas diarias en YouTube, e incluso superó los 50.mil espectadores simultáneos en ciertos momentos.
How a livestream of deep-sea oddities has captivated Argentina
Footage from the depths of the South Atlantic has garnered millions of views and even sparked a backlash against President Milei’s defunding of science
  • En promedio, cerca de 24.000 personas se conectaron por día para ver el fondo marino en tiempo real.
  • En las noches, el canal se convirtió en el streaming más visto del país, desplazando contenido habitual de entretenimiento.
A livestream of deep sea creatures transfixes Argentina and sparks calls for refunding science
Transparent-faced fish drift through dusky waters. Snowlike flecks of dead plants sift down from the world above. Soft sponges peek through the soot of the seafloor.

La voz del público: memes, apodos y orgullo nacional

En plataformas como X (Twitter) e Instagram, los usuarios reaccionaron con espontánea creatividad:

  • “¡Mirá esa estrella de mar naranja, parece Patricio de Bob Esponja!”, escribieron tras ver una estrella bautizada como “estrella culona”.
  • Un pepino de mar púrpura fue bautizado humorísticamente como “Batatita”, generando humor científico viral.
  • Desde memes visuales hasta encuestas estilo “¿Qué criatura del fondo sos según cómo manejás el estrés?”, se viralizaron en redes, humanizando a las especies abisales.

Ciencia pública en tensión: un debate político

El momento de impacto digital coincide con un contexto crítico: el recorte presupuestario del 21% en el CONICET, pérdida de poder adquisitivo en salarios y recortes de investigadores.

A pesar de ello, los científicos llaman a una huelga nacional de 48 horas para visibilizar su situación.

El contraste llama la atención: mientras el fondo marino argentino genera asombro colectivo, las condiciones del sistema científico muestran una crisis estructural.